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Posición atlética

Una posición atlética adecuada es la base de un movimiento eficiente. Comprender los componentes de una posición atlética adecuada permite a los entrenadores, padres y atletas practicar y desarrollar las habilidades necesarias para lograr naturalmente la posición durante las actividades deportivas.

Los aspectos básicos de la posición atlética son los siguientes:

  • Pies separados a la anchura de las caderas o de los hombros
  • Posición de media sentadilla
  • Peso corporal distribuido uniformemente entre ambos pies
  • Centro de gravedad directamente encima de la base de apoyo
  • Hombros nivelados
  • Torso plano e inclinado ligeramente con respecto a la vertical (75 grados).

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Los «puntos de control» clave en la posición atlética son la bisagra (ligera flexión) en las caderas y la flexión (ligera flexión) en las rodillas. Las caderas también deben estar ligeramente «abiertas», lo que hace que las rodillas miren ligeramente hacia fuera; en resumen, la posición de media sentadilla.

La posición atlética crea tensión de la misma manera que un resorte tiene tensión cuando se estira ligeramente. Los científicos deportivos utilizan la frase «ciclo de estiramiento-acortamiento» (o CEA) para describir el efecto asociado con la posición atlética y posiciones corporales similares. En la posición atlética, los grupos musculares de la pantorrilla, los isquiotibiales y los glúteos (nalgas) se estiran ligeramente, lo que crea tensión y estimulación de los elementos musculares. Cuando los músculos se tensan (las caderas, las rodillas y los tobillos se enderezan), la energía se libera. Las investigaciones han demostrado que el uso del efecto CEA crea una mayor potencia que una simple contracción muscular.

Varios elementos atléticos del fútbol se ven afectados positivamente por el uso de una posición atlética:

  • Movimiento lateral
  • Aceleración y desaceleración
  • Regate y giros
  • Altura del salto
  • Mecánica de aterrizaje
  • Movimientos en espacios reducidos y tiempo de reacción física

La posición atlética permite cargar la fuerza a través de tejidos blandos en lugar de directamente en las articulaciones (específicamente, la articulación de la rodilla), lo que reduce el riesgo de colocar la rodilla en una posición insegura que pueda provocar lesiones.

Además, la posición atlética es un movimiento básico en actividades de potencia/fuerza de resistencia como el peso muerto, las sentadillas y los ejercicios con kettlebell.

El uso de la posición atlética es común en las siguientes situaciones:

  • Llevar el balón en espacios reducidos
  • Ejecutar fintas/movimientos sobre el balón
  • Movimientos laterales (de lado a lado)
  • Retroceso
  • Movimientos diagonales hacia delante/atrás

La posición atlética es una parte fundamental de la defensa 1 contra 1, donde el jugador debe ser capaz de responder a los movimientos iniciados por el atacante mientras permanece comprometido y dentro de una distancia de presión.

Mantener la posición durante el movimiento (evitando cruzar los pies, ponerse de pie demasiado pronto, poner demasiado peso corporal en un pie o perder el equilibrio) son partes importantes de un rendimiento eficaz en el juego.

Demostración en vídeo

Referencias

Howard, R. (2018). The ABCs of Long-Term Athletic Development. Retrieved 28 January 2018, from https://www.nsca.com/Education/Articles/The-ABCs-of-Long-Term-Athletic-Development/

Miyaguchi, K., & Demura, S. (2008). Relationships between muscle power output using the stretch-shortening cycle and eccentric maximum strength. The Journal of Strength & Conditioning Research, 22(6), 1735-1741.

Suter, e. (2017). Total youth soccer fitness.